domingo, 28 de febrero de 2010

Balance de dos días memorables (II): Merci, Bruxelles

Seguimos con la evaluación de estos días. Toca ocuparse del "evento principal": la ceremonia de investidura del Manneken Pis. Si hubiera que resumirlo en una sola palabra, sería esta: Perfecto.

El Ayuntamiento de Bruselas nos abrió a las 10 de la mañana las puertas de la espectacular Salle des Mariages (en la cual, según nos comentaron, solía despachar el emperador Carlos V, hace 500 años). Incluso siendo como somos "de Bilbao", nos impresionó. La foto de grupo que veis aquí -hay más en este link- fue tomada al final del acto.

En ese marco, ante unos 60 asistentes y con una parafernalia exquisita (recepción, catering, camareros, tribuna de oradores, nuestro traje para el Manneken y su txapela en una bandeja de plata, los Miembros de la Orden vestidos con el uniforme de las mejores galas, Libro de Oro para firma posterior al evento...), la recepción oficial fue muy "a la bruselense": Formal, pero muy distendida; solemne en el fondo, pero siempre afable y por momentos muy divertida.

El Concejal de Cultura rompió el hielo con una intervención en la que subrayó los valores del deporte como unificador de gente de diversos orígenes (su propio nombre, Hamza Fassi-Fihri, dice mucho en este sentido). Comentó que le parecía especialmente importante el hecho de que "bruselenses de adopción" como nosotros quisiéramos unir a un símbolo de nuestra ciudad de origen -el Athletic- con otro de la ciudad en la que vivimos -el Manneken.

Por nuestra parte, hubo tres breves discursos: el Presi de la Peña se encargó de agradecer al Ayuntamiento su deferencia por prestarnos el emblema de la ciudad precisamente en esa fecha y -lo cual tiene aún más mérito- tras los incidentes del partido de ida. Una verdadera lección de "fair play" a la bruselense de la que todos (athleticzales y supporters del Anderlecht) deberíamos aprender.

Gainera, bereziki poztu gintuen historiaz beteko gela ta Udaletxe hortan "ofizialki" euskaraz hitz egiteko aukera izateak - hitzaldia bukatzeko bakarrik bazen ere, gure berbaldiaren gehiena frantsesez egin baitgenuen.

El Presidente del Athletic (que acudió a la ceremonia junto con los miembros de la Directiva, la responsable de relaciones Institucionales, el Txopo y Koldo Aguirre) entregó como regalo al Concejal una camiseta del club, y el Secre de nuestra Peña ensalzó a continuación -para los forasteros, claro, los de Bilbao no necesitábamos ninguna explicación- las virtudes de la vestimenta que ofrecíamos al pequeño Manneken: su historia, su simbología y sus valores.

El peñista Otutu, en un guiño de complicidad hacia nuestros anfitriones, habló en Brusseleer (dialecto de la ciudad) en un discurso que arrancó varias carcajadas sinceras entre los locales - los no-bruselenses entendimos más bien poco, la verdad, pero se trataba precisamente de eso...

El veterano Presidente de la Orden de Amigos del Manneken Pis cerró la ceremonia con su buen humor, y nos entregó un Diploma de Honor "en reconocimiento a los servicios prestados a las tradiciones y el folklore de Bruselas". Ahí queda eso.

Tras la ceremonia hubo un cocktail (verre de l'amitié) al que nos invitó al Ayuntamiento. Mientras, el "vestidor oficial de la Orden de Amigos del Manneken Pis" se encargaba de hacer su trabajo metódicamente -ver la foto- para que el niño estuviera bien guapo (nota: no fue "la afición del Athletic" la que vistió a la estatua, como algunos medios dijeron: era todo bastante más oficial).

Camino de la esquina entre la Rue de Chêne y la Rue de l'Etuve, la comitiva se llevó una agradable sorpresa: desde el segundo piso de un apartamento del centro bajo el cual pasábamos, se abrió una ventana y un chico (creo que estaba aún en pijama, que me corrija si me equivoco) soltó -algo sorprendido, muy entusiasmado, en todo caso- un "Aupa Athletic!!" que le salió del alma. Ya es casualidad pasar debajo de la cocina de un paisano (igual resulta que era de Cuenca y del Barça, pero me gusta pensar que era un forofogoitia al que alegramos el desayuno).

Una vez allí, hay vídeos y fotos en Internet para hartarse: nuevo discurso del Presidente de la Orden, Macua retirando el velo que ocultaba la estatua, y ovación para el pequeñín vestido de rojiblanco, con una txapela que le iba que ni pintada, y que -eufórico- nos obsequió con un poderoso chorro. Por cierto, para los que se lo perdieron: un ejemplar del Manneken vestido del Athletic quedará permanentemente instalado en su Museo, situado en el centro de la ciudad.

Lo repetimos. Puede que haya a quien le parezca una chorrada, pero a nosotros (Bruselenses y miembros de la Peña) nos hizo mucha ilusión.

Honaino heltzen da Athleticzaleen grina!

sábado, 27 de febrero de 2010

Balance de dos días memorables (I): Gracias, Athletic Club

Mas que un balance habría que hacer varios. Así que vayamos por partes, empezando por el Athletic Club (así, con mayúsculas).

Como Peña fundada hace apenas un año, no hubieramos podido imaginar un escenario mejor para nuestra puesta de largo que un partido europeo de prestigio en nuestra ciudad.

Tratamos de hacer todo lo posible para que la ocasión mereciera la pena, y el Athletic, como Institución, estuvo más que a la altura. Presidente y Directiva, que seguramente tendrían bastantes otras cosas que hacer, acudieron tanto a la inauguración oficial como al evento en el Ayuntamiento.

Habrá quien diga "¡qué menos!". No me parece tan evidente. Cuando se tienen cargos de responsabilidad en una Institución hay muchos 'marrones' que resolver y muchos temas que coordinar, y más aún cuando se trata de un desplazamiento al extranjero y el viaje se ve envuelto en unas circunstancias desagradables que hacen que el partido sea casi algo secundario.

Sin embargo, estuvieron ahí. La inauguración oficial tuvo lugar en nuestra sede y se inició con intercambio de regalos: Macua nos entregó una placa conmemorativa de "Peña oficial" y una camiseta firmada por los jugadores por parte del Athletic, y nosotros dimos al club una réplica exacta del Manneken Pis con equipación rojiblanca (50 cms de 'equipaje de mano' para el vuelo de vuelta).
Después, la Directiva rojiblanca volvió al hotel para seguir preparando el partido del día siguiente, y nosotros nos quedamos para una estupenda cena en compañía nada menos que de Iríbar y Koldo Aguirre, que demostraron que además de ser dos mitos de la Historia rojiblanca son dos tíos estupendos.

Tuvimos también la suerte de poder contar con la presencia de la Peña de Torrevieja (organizadores del último Congreso anual de Peñas del Athletic) y de una representación del Ayuntamiento de Balmaseda, amigos de algunos de nuestros peñistas. Nuestro agradecimiento para ellos también.

El ambiente fue extraordinario y la comida deliciosa ("de rompe y raja", Miguel).
Pero lo mejor de todo fue saber -como peñista, como aficionado- que tu Club está contigo. Nos decía Koldo Aguirre que a lo largo de su carrera ha trabajado en varios equipos (ha sido un técnico viajero que he entrenado en diversos sitios de la Península), pero que ninguno era como el Athletic. Al preguntarle qué era lo que marcaba la diferencia, contestó sin dudar: "la clase, el estilo, cosas que se ven en los pequeños detalles".
No dudamos que este es uno de ellos: Presi, Txopo y Koldo de una tacada, durante dos días. Y a 1.200 Kms de distancia.
Detallazos como estos hacen que nos sintamos orgullosos de pertenecer a este Club.
Chapeau, Athletic!

domingo, 21 de febrero de 2010

De este meón no queremos nada

El Athletic ha identificado y suspendido cautelarmente como socio al individuo que orinó sobre los aficionados del Anderlecht.

Mi opinión personal: me alegro, y espero que esta suspensión sea definitiva. Este tipejo ha puesto al Athletic y a su afición en evidencia delante de toda Europa, además de dar argumentos de peso (una imagen vale más que mil palabras) a la minoría de aficionados belgas que fueron a Bilbao a liarla, y que por fotos como esta se sienten más que legitimados para dar un recibimiento "caliente" (cito textualmente la prensa belga) a los aficionados del Athletic que vengan a Bruselas.

Con grandes dosis de entusiasmo y bastantes horas de precioso tiempo habíamos intentado que el partido del próximo jueves fuera una fiesta, pero impresentables como este (algunos bilbaínos, otros tantos belgas) lo han transformado en un acontecimiento de riesgo.

Me paro en la foto: En nuestro post anterior decíamos que el niño meón ya es nuestro. El imbécil meón, afortunadamente, no lo es. El copyright del logo lo tenemos desde antes. Y el león del genial Forges tiene seguramente muchas más neuronas que él.